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¡Siempre podrás cambiarlo o devolverlo! Si al realizar el trámite nos explicas porqué te ha quedado mal el artículo te lo agradeceremos mucho ¡nosotras seguimos aprendiendo! Y podremos ayudarte mejor a encontrar tu sujetador ideal.

Las bragas que son desprecintadas no se cambian por motivos obvios de higiene. Y para probarla tienes que quitarle el precinto. Lo que sí puedes hacer es compararla con alguna de las tuyas para ver si el tamaño es el que buscabas. Para esta comparativa ten en cuenta también la elasticidad de los tejidos. Hay algunas que son visualmente más pequeñas pero que dan más talla.

¡Siempre podrás cambiarlo o devolverlo! Si al realizar el trámite nos explicas porqué te ha quedado mal el artículo te lo agradeceremos mucho ¡nosotras seguimos aprendiendo! Y podremos ayudarte mejor a encontrar tu prenda ideal. 

Recuerda que al tratarse de una prenda íntima, deberá mantener el precinto con el que la enviamos.

Tiene que cumplir estos seis puntos:

1. Todo el pecho está dentro de las copas: No se te sale ni por encima de la copa, ni por debajo de la copa…¡Ni por los lados!. ¿Cómo lo puedes comprobar? Al levantar los brazos, la banda inferior o los aros no se tienen que mover. Tienen que quedar pegados al cuerpo. 
2. La banda del sujetador queda horizontal a la finalización de tu pecho en la espalda. Ni se te sube al moverte ni te estrangula. 
3. Las copas no te ahuecan. ¿Sabías que los sujetadores armados ahuecan cuando te quedan grandes pero también cuando te quedan pequeños? 
4. No necesitas usar un alargador para estar cómoda. 
5. Los tirantes no se te caen: ¡Algunos vienen muy largos! Por suerte es una parte que se puede arreglar con mucha facilidad. 
6. ¡Estás cómoda! Y te olvidas de él… Un buen sujetador es el que no molesta, del que te olvidas y no tienes que colocar cada cinco minutos…

¡Esta pregunta es súper importante! Tienes que asegurarte de que el sujetador esté correctamente colocado para comprobar si es tu talla correcta. Aquí vamos a contarte la manera ideal de colocarte el sujetador, para que el pecho quede bien colocado y dure el máximo tiempo posible. (Si quieres también puedes ver nuestro vídeo)

1. Mete los brazos por los tirantes. 
2. Sujeta la parte inferior del sujetador (aros) y tira de ella hacia abajo para situarla debajo del pecho. 
3. Inclina tu cuerpo 90 grados hacia delante. Así conseguiremos que el peso de tu pecho lo coloque correctamente en el centro de la copa. 
4. Abrocha el sujetador. Si es la primera vez que te lo pones, debería estar abrochado en el más flojo. ¿Por qué? Para que cuando el sujetador ceda (porque no olvidemos que es un tejido elástico) puedas mantener la presión usando los ganchos más apretados. 
5. Vuelve a la vertical y coloca los tirantes en paralelo. 
6. Llega el momento de “el tiki-tiki”. Consiste en coger el sujetador con una sola mano por la parte central superior de la unión de los aros  y pegar un “meneo”.
   1. Con eso lo que queremos es “repartir el peso del pecho”.
   2. Así te aseguras que no hay teta debajo del aro y que está “todo recogido” (y sujetado)
   3. ¡No temas repetirlo si te has quedado corta! El tiki-tiki siempre coloca, nunca descoloca. 
7. Mete la mano en el lateral, coge la teta y atrae el tejido hasta el centro, asegurándote que está toda dentro de la copa. 
8. ¡Disfrútalo!

¡No pasa nada! Podemos enviarte otra talla o puedes elegir otro modelo sin problemas. Siempre estamos atentas en tengounapregunta@reinascorseteria.com por si tienes alguna duda. 

¡Un consejo! Antes de realizar el cambio o la devolución consulta si te has puesto la prenda de manera correcta. Hay veces que ¡solo hace falta colocar bien la prenda! 

Recuerda que para realizar cambios o devoluciones la prenda tiene que estar en las condiciones originales de envío.

El universo de las tallas de sujetador es un mundo complejo y confuso. Hay sujetadores que tienen la talla en lenguaje UK, otros en Europea y otros en Francesa… ¡Y alguno en alemana! Que es como la de UK pero restando 4 y sin doblar las copas. Las de europea restan 15 a las francesa. En algunos usan la letra I y en otros no. Cada marca trabaja de una manera distinta, en cuestión a la cosida y elasticidad de las piezas. Además, cada sujetador tiene un patronaje diferente a otro y ¡cada uno da una talla diferente! Cualidades como el color cambia la profundidad de la copa. Y ¡no vamos a hablar de los tejidos! Todas las mujeres tenemos una talla “de referencia”. Una unión de una letra y un número que nos coloca en un espectro de talla, pero que luego puede variar en según qué modelo o de qué marca. Así que, olvídate de toda esta ciencia compleja y ¡disfruta de tu compra! Después del registro solo verás los artículos disponibles en tu talla. Tú solo tienes que elegir… ¡si puedes!